miércoles, 12 de mayo de 2010

I Edición de los 101 Peregrinos, Ponferrada 9 de Mayo del 2010

Hacia tiempo que habíamos tomado la decisión de acercarnos a tierras del Bierzo (bien conocidas por la noche pero poco por el día)  para participar en la primera edición de los 101 kms peregrinos. Una prueba que nace de la herencia de los míticos 101 kms de Ronda. El perfil no se antojaba, a priori, demasiado duro, ya que el desnivel acumulado andaba por los 2200 metros y las subidas no parecían demasiado largas, con 3-4 kilómetros.



Esta va a ser una crónica un tanto especial ya que hasta allí nos desplazamos Borja, Angel, Pablo, Jose, Zorcas y yo (Ramón) pero una vez dado el pistoletazo de salida la carrera nos puso a cada uno en su sitio y solo Pablo sacó fotos. En mi caso, la exigencia del circuito hizo que no observara demasiado los fántásticos paisajes que nos albergaron durante toda la ruta y solo Pablo tuvo las ganas necesarias para ir haciendo alguna foto.

El viernes llegamos a eso de las 20:45 y fuimos directos a recoger los dorsales


Una buena cola nos esperaba, así que ahora a esperar nosotros un rato largo. Sobre las 10 lo teníamos todo listo así que a cenar. Por circunstancias de la vida, aunque pensábamos hacer noche en casa de Zorcas hubo un cambio de planes y tuvimos que improvisar para quedarnos en un hostal a la salida de Ponferrada dirección Villablino donde cenamos "ligero", ¿Verdad Pablo? y luego pronto a la cama.

Al día siguiente a las 08:30 arriba para desayunar y desplazarnos con tiempo hasta la salida. La cosa estaba jodida, tenía pinta de haber llovido bastante durante la noche...MIEDO!!


Una vez preparados y montados en las bicis accedemos a la zona de salida con un sol bastante engañoso. La verdad es que hacía muy bueno, ojala hubiera aguantado toda la ruta....



Pistoletazo de salida y en ruta. De momento son todo risas por las calles de Ponferrada y pronto tomamos la primera pista, de momento bastante relajada. Pero pronto iba a cambiar la cosa...Tras una curva de 90 grados nos encontramos con este pequeño repecho donde prácticamente todo el mundo puso pie a tierra:


De momento sin problemas, nada fuera de lo normal. Sin embargo tras coronar esta subida, comenzaba la fiesta!!!! La pista se convirtió en un barrizal terrible con una mezcla de arcilla y loctite que se pegaba a las cubiertas hasta que cegaba el paso de rueda y la bici decidía no andar mas. Para que hablar de los cambios, frenos y demás... Unica solución, cargar con la bici al hombro durante un buen cacho. Como muestra unas cuantas imágenes:



Una vez pasada esta zona, donde echamos un buen rato, a tratar de limpiar las ruedas con piedras o similar y la transmisión y cambio con palos, muy divertido...

La cosa por desgracia no fue a mejor y a lo largo de toda la ruta continuamos con zonas de barro alternadas con fuertes subidas. Para rematar, a eso de las 13 horas comienza a llover, al principio debilmente pero pronto se hace mas intensa y nos acompaña durante toda la prueba, complicando más aún si cabe el estado de las pistas. Los paisajes eran una maravilla, ahora que me doy cuenta al ver las fotos (especialmente la zona de la explotación romanda de Las Médulas, patrimonio de la humanidad):


Como quien no quiere la cosa, habíamos hecho ya unos cuantos kilómetros en los que los avituallamientos no habían estado en absoluto a la altura de una prueba de esta envergadura. Un Aquarius en el km.25 y barritas energéticas sobre el 35...bastante lamentable para los 40 euros que habíamos pagado.

Con el estado del terreno costaba sumar metros, mas de una vez me lié a palos con el cuenta pensando que se había quedado trabado. Sin embargo fuimos avanzando y con no poco sufrimiento llegamos a los últimos 10 kilómetros de la prueba. "Ya está hecho", nos gritaban al pasar  y eso pensábamos también nosotros, que esperábamos unos un final relajado para disfrutar de la llegada con la conciencia tranquila por el deber cumplido. Nada mas lejos de la realidad!!Tras una subida corta por carretera giramos a la izquierda para tomar una pista donde la gente de la organización ya nos avisa: CUIDADO CON EL BARRO EN LA ZONA DE ABAJO. Creo que decir barro no fue suficiente...uuuuuuf, que horror, trampa mortal! De hecho mucha gente se desvió por carretera tras el primer tramo de bajada para llegar directamente a Ponferrada salvando la parte final de la prueba. Nosotros decidimos continuar y por momentos pensé que fue un gran error. No solo nos encontramos con esa bajada, sino con horribles llanos a falta de 6-7 kilómetros donde de nuevo las ruedas se negaban a girar cegadas por el bendito barro. Estamos volviendo sobre nuestros pasos del inicio de la prueba y entramos de nuevo en la zona de las vides por la que de forma tan fácil habiamos pasado por la mañana. De nuevo trampa mortal!!La lluvia había transformado el camino y un repecho de unos 200 metros se hacía durísimo, con la bici a cuestas, resbalando para poder llegar arriba, llenos de pura mierda...

Una vez ahí por terrenos medianamente ciclables hasta llegar a la orilla del rio que nos acompañó durante el último kilómetro. Vuelta a la carretera y entrada al complejo donde nos esperaba la meta bajo una intensa lluvia y bastante frío.


Un intento para limpiar las bicis mientras nos contínuabamos mojando totalmente destemplados, cambio rápido de ropa, bocadillo rancio totalmente engullido y 3 horas de coche para llegar bien molidos a casa.

Increibles los resultados: Borja (7º),  Zorcas(12º), Pablo(46º), Angel(154º) y yo (155º) de los 760 participantes en la prueba.No sé cómo quedó Jose, tengo que investigar, pero entre los primeros. Creo que una vez mas Cantabria quedó perfectamente representada por todos los que nos desplazamos a Ponferrada, donde al margen de nosotros había por allí multitud de paisanos BTTeros.

Creo que toca reflexión para la organización, especialmente en lo que respecta a los avituallamientos y quizá la asistencia por lo que he podido leer por diversos foros.

A ver que ocurre el año que viene....

domingo, 2 de mayo de 2010

1º parte del soplao + el moral

Después de un fin de semana sin tocar la bici y… lo que es peor, de haber castigado al cuerpo con una despedida de soltero (se nos casa el peque) necesitábamos hacer una ruta larga para seguir con nuestra preparación para el soplao. Decidimos hacer la 1º parte del soplao más la subida al moral.



Cogimos el tren desde torre hasta cabezón, salimos Pablo, Ángel, Ramón, Jandro, Chave (David) y yo (Borja) a eso de las 9:30, con una cara de felicidad que para que contar, vale mas una imagen que mil palabras…



Aunque el día amenazaba agua, al final aguantó. Tras pasar la zona del monte corona a buen ritmo, llegamos a la primera dificultad del día, la subida a la hermita de san Esteban.



Las piernas nos respondían a la perfección!! En la bajada a Caviedes tuvimos que bajar muy despacio ya que el suelo estaba resbaladizo debido al agua caído la noche anterior.
Un tramo cómodo de asfalto y… la subida al soplao, esas temidas rampas de piedra en las que cada uno subió como pudo.



Al llegar a la cueva del soplao paramos a comer algo



Y sin mas, bajamos hacia Celis por esa pista en mal estado, que es una de las pocas bajadas técnicas que tiene la marcha del soplao, ideal para los que les gusta darle algo de cera bajando. Después, un tramo de cómodo asfalto y…. ZAS, la subida al monte AA, con esas rampas de hormigón del 20% que tanto disfrutamos :-)









Después de un rapidísimo descenso, llegamos a Ruente, en un tiempo de 4 horas, y aprovechamos a comer y beber para llegar frescos a la última subida del día



La subida al moral, 10 interminables km, que sumados a la paliza que llevamos ya encima se nos hacen interminables, atrás quedaron esas sonrisas con las que empezamos el día…





Aquí tuvimos dos bajas, Chave, que tenia que irse pronto a casa y tiro hacia cabezón, y Ramón, que intento subir el moral y vaya ostias que le casco el señor del mazo, pero no en las piernas, sino en la espalda, obligándole a volver a cabezón a coger el tren. Los demás nos las apañamos para llegar arriba cada uno por su cuenta y con intervalos de varios minutos entre nosotros, vaya paliza teníamos ya encima, solo de pensar que el día del soplao todavía nos quedarían fuentes y el moral por el otro lado… uuffffff, vale mas no pensarlo. Después bajamos por Cieza y, sabiendo que no quedaban más subidas y aprovechando que era bajado, volvieron las sonrisas

Pero aun así se hizo largo el regreso a casa, sobretodo a Pablo y a mi, con la temida subida de Hinojedo, que después de los 125 km que nos salieron se hace “dura de cojones”. Por cierto, salieron 2475m de desnivel subiendo, que no esta nada mal.
Bueno, pues hasta la próxima ruta, nos vemos.